El reclamo que comenzó con residentes se expande al personal de planta en hospitales clave como el Garrahan y el Posadas. Exigen mejoras salariales y condiciones dignas.
El conflicto que comenzó con los residentes médicos se expande en los hospitales públicos nacionales, sumando nuevos actores y tensando aún más la situación. En el Hospital Garrahan, los residentes decidieron continuar con el paro iniciado hace más de una semana, mientras que en el Hospital Posadas se sumaron médicos de planta que exigen mejoras salariales y condiciones de trabajo más dignas.
Los profesionales denuncian sueldos que no alcanzan para cubrir necesidades básicas, jornadas extenuantes y la falta de respuestas concretas por parte del Gobierno. El Ministerio de Salud ofreció un aumento salarial del 9% para junio, que se suma al 16% ya otorgado en mayo, pero los trabajadores lo consideran insuficiente frente a la inflación acumulada y el deterioro del poder adquisitivo.
Este lunes se realizó una asamblea clave en el Garrahan para definir si se acepta o no la última propuesta oficial, pero hasta ahora el conflicto sigue vigente. En el Posadas, los médicos realizaron protestas en los pasillos del hospital, reclamando por una recomposición salarial y en apoyo a los residentes.
La prolongación del conflicto pone en riesgo el normal funcionamiento de los hospitales y ya se observan demoras y reprogramaciones en algunas áreas. Desde los sindicatos y agrupaciones profesionales anticipan que, si no hay una respuesta satisfactoria, las medidas podrían profundizarse en los próximos días.
