Con un triunfo histórico ante Gales, el Seleccionado argentino se metió en la semifinal del Mundial de Francia 2023
Era un día soleado en Marsella, la ciudad portuaria del sur de Francia que albergaba uno de los partidos más esperados del Mundial de Rugby 2023: Los Pumas de Argentina contra los Dragones Rojos de Gales. Ambos equipos habían llegado a los cuartos de final con méritos propios, pero solo uno podía avanzar a las semifinales y seguir soñando con la gloria.
Los Pumas venían de superar la fase de grupos con dos victorias y una derrota, y se habían ganado el respeto y la admiración de muchos aficionados por su juego dinámico, aguerrido y solidario. Gales, por su parte, había sido el líder de su grupo con tres triunfos y ningún traspié, y se presentaba como uno de los candidatos al título por su experiencia, su potencia y su disciplina.
El partido comenzó con un dominio claro de los galeses, que aprovecharon sus oportunidades para anotar un try y un penal, y ponerse 10-0 arriba en el marcador. Los Pumas, en cambio, no lograban concretar sus ataques y cometían errores que les costaban caro. Parecía que el favoritismo de los europeos se confirmaba en la cancha.
Pero Los Pumas no se rindieron. Con el apoyo de miles de hinchas argentinos que llenaban las tribunas del estadio, y con el orgullo de defender la camiseta celeste y blanca, los sudamericanos empezaron a revertir la situación. Con una defensa férrea, una presión constante y una efectividad en el pie de Emiliano Boffelli, el fullback que se convirtió en el máximo anotador del partido con 14 puntos1, Los Pumas lograron acortar la distancia a solo cuatro puntos al final del primer tiempo (10-6).
El segundo tiempo fue una demostración de carácter, inteligencia y coraje por parte de Los Pumas. Con el ingreso de algunos suplentes que aportaron frescura y dinamismo, el equipo argentino tomó el control del juego y sometió a los galeses a una presión asfixiante. Los tries de Joel Sclavi y Nicolás Sánchez sellaron la victoria por 29-172, que desató la euforia de los jugadores, el cuerpo técnico y los aficionados argentinos.
Los Pumas habían hecho historia. Por tercera vez en su historia, se habían clasificado a las semifinales de un Mundial3, repitiendo las hazañas de 2007 y 2015. Además, habían vengado la derrota sufrida ante Gales en los cuartos de final del Mundial 20194, cuando un polémico arbitraje les había impedido avanzar. Los Pumas habían rugido en Marsella, y habían demostrado que son capaces de enfrentar y vencer a cualquier rival.
Un tackle de Moroni para la historia
El tackle de Moroni fue una de las jugadas más destacadas del partido entre Los Pumas y Gales por los cuartos de final del Mundial de Rugby 2023. Moroni, que llevaba el número 23 en su camiseta, logró evitar un try de Louis Rees-Zammit, el veloz wing galés, cuando faltaban seis minutos para el final y el resultado estaba 19-17 a favor de Argentina. Moroni lo empujó fuera de la cancha con una gran determinación y le dio un respiro a su equipo, que luego pudo ampliar la ventaja con un try de Nicolás Sánchez1.
Muchos compararon el tackle de Moroni con la atajada de Emiliano Martínez, el arquero argentino que también usó el número 23 en el Mundial de Qatar 2022, y que le tapó un penal decisivo a Kolo Muani en la final contra Francia2. Ambas acciones fueron claves para que Argentina llegara a las semifinales de dos mundiales consecutivos, algo histórico para el deporte nacional.
Artículo escrito por IA