El jueves 10 de abril se llevó a cabo el tercer paro general al Gobierno de Javier Milei. A pesar de que todos los servicios de trenes, subtes y aviones estaban cancelados., la UTA no se sumó a las medidas de la CGT y servicios en distintos puntos del país sufrieron represaliaras.
En Bahía Blanca tuvieron que suspender el servicio de colectivos luego de que al menos 15 unidades de distintas líneas fueran atacadas con piedras desde la madrugada. En Parque Leloir, en el partido bonaerense de Ituzaingó, una unidad de la línea 269 fue apedreada durante la madrugada, mientras circulaba por la intersección de las calles Leloir y Udaondo, por lo que algunas líneas tuvieron que suspender su servicio y empezar a funcionar luego de las cinco de la mañana.
Otra situación similar se reportó desde Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut. Según informaron desde la Comisaría Quinta, el interno 36 de la línea 3 fue atacado con piedras. Si bien el chofer resultó ileso, fue asistido por personal médico del servicio de emergencias y luego trasladado a la Clínica del Valle, donde fue dado de alta.
Ante los ataques a los colectivos, la CGT emitió un comunicado en el que repudiaron los actos vandálicos y pidieron por la intervención de la Justicia. “Esperemos que actúen encontrando a los responsables de haber generado esos daños y de poner en riesgo la integridad física de choferes y pasajeros que circulaban en esas unidades”, expresaron.
A pesar de los incidentes, ningún pasajero salió herido y esto no afectó a la normalización de los servicios para el viernes por la mañana. Los daños se caracterizaron principalmente por roturas de parabrisas, lunetas y ventanillas.
Narela Ferrarotto.
