La senadora Mónica Silva por Río Negro, con terminales en el gobernador Alberto Weretilneck, quiere eliminar «el botón de boleta completa». El oficialismo aceptaría.
Por Gonzalo Demonte – NA
El consenso para que el proyecto que implanta la votación mediante la Boleta Única de Papel (BUP) llegue al recinto del Senado de la Nación toma forma, tras más de seis meses de estancamiento y haber quedado solapado por la discusión del Decreto de Necesidad Urgencia (DNU) 70/23 y la Ley Bases.
Las negociaciones oficiales podrían quedar plasmadas en el plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justica y Asuntos Penales -¿en agosto o septiembre?-, donde podrían llegar a converger las diferencias que existen entre los dos despachos que obtuvo el proyecto el pasado 10 de enero.
Aquella reunión plenaria concluyó con la firma de un dictamen de mayoría que tuvo el acompañamiento del bloques federales, La Libertad Avanza, el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR). Por otro lado, la senadora Mónica Silva (Río Negro) impulsó otro de minoría con el apoyo del kirchnerismo y del senador Carlos Arce (Misiones).
Tanto Silva como Arce, sumada la senadora Sonia Rojas Decut (Misiones), forman parte de la denominada «oposición dialoguista» de la Cámara alta y son clave para el oficialismo a la hora de la construcción del quórum y de las mayorías mínimas constitucionales que se necesitan, dependiendo el caso, para aprobar un proyecto.
Sin el apoyo de estos tres senadores, el poroteo con respecto a la BUP queda empardado en 36 votos para cada lado y sin posibilidad de que la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, pueda desempatar al tratarse de un electoral. Por esta razón, la BUP duerme desde el verano en el Cámara alta.
Fuentes consultadas por Noticias Argentinas cercanas a Silva reafirmaron la postura de la senadora rionegrina con terminales en el gobernador Alberto Weretilneck. Si bien existen otras, la principal diferencia entre ambos despachos pasa por el casillero que permite la elección de la «boleta completa» a la hora de elegir.
«Vamos a sostener la necesidad de eliminar el botón de boleta completa«, le dijeron a NA ante la consulta. La frase deja entrever la intención de convergencia. Es decir, si el dictamen de mayoría incorpora la modificación que pide Silva las posibilidades de que la BUP llegue al hemiciclo son casi un hecho.
Del otro lado, uno de los promotores de la BUP en los pasillos del Senado fue Maximiliano Abad (Buenos Aires). Según pudo saber esta Agencia, el titular de la UCR de la Provincia de Buenos Aires estuvo en conversaciones con referentes del Gobierno y hasta visitó la Casa Rosada por el tema.
Durante la semana pasada, Abad aseguró que se «puede mejorar el sistema electoral argentino mediante este cambio en el instrumento de votación» y afirmó que «sería un avance sustantivo». Además, consideró que podría «regenerar una relación virtuosa entre representantes y representados».
El reflote de la BUP se da en medio de un intento por parte del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, por eliminar las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Esta idea de Francos no tiene consenso casi en ningún bloque y en el Senado le ofrecen esta salida al ministro coordinador.
De tener luz verde la BUP en la Cámara alta con modificaciones, debería regresar a la Cámara de Diputados.
Con información de la Agencia Noticias Argentinas